El quinteto oriundo de Concepción Mantarraya se va de viaje por primera vez a México en menos de una semanita, así que aprovechamos que andaban tocando en un evento organizado por Lagartija Records en Antofagasta para conversar con Bastián, Cocó, Luciano y Chocho sobre los orígenes de la banda, su último disco y el movimiento en los escenarios penquistas.
¿A qué se debe el nombre “Mantarraya”?
Cocó (Nicolás Ferrada, teclados): Todo nace en el año 2011, cuando no teníamos nombre. No sabíamos quienes éramos -risas-, el Bastián tenía estos acordes raros que hacía y le poníamos nombres de dinosaurios, como “velociraptor”, y después empezamos a buscar nombres con eso, como de dinosaurio. Esa era la idea, de que nos llamáramos como un dinosaurio, pero no sé quien pilló “Mantarraya”.
Bastián (Grañas, voz y guitarra): Teníamos la idea de animales marinos vinculada a lo de los dinosaurios, entonces ahí pescamos algunos que nos gustaban: “Mantarraya”, “Pez Espada” y al final votamos porque “Mantarraya” sonaba mejor y nos gustaba también, se veía bonito. Al principio no tuvo un nombre conceptual tan grande. Después, en el primer disco, “Costa Esqueleto”, ya tiró raíz el concepto del nombre, por lo relacionado al mar y todo eso. Pero al comienzo sólo nos gustaba la palabra.
¿Cómo parten sus primeras presentaciones?
Cocó: Tocamos en el mismo lugar como tres veces.
Chocho (Rodrigo Droguett, bajo): Cocó, todo esto partió gracias a ti.
Cocó: Ah, sí, porque conocía al Melo. Saludos al Melo. Es dueño de Casa de Salud y tenía un ciclo que se llamaba “Tras Bambalinas”, era en el teatro de la Sala 2 y literal era tras bambalinas, la gente estaba en el escenario y vendían copete y todo. Ahí fueron los primeros tres shows que hicimos. De ahí, cuando cerró la Sala 2, conocimos al Gustavo y entramos a Beast al tiro -risas-. Ya en la tercera tocata nos unimos al sello y nos dimos la vida que nos merecíamos -risas-, viajes a Miami -más risas-. Fueron súper bacanes esas presentaciones, siento que nadie nos conocía e igual nos iba súper bien.
¿Qué es lo más difícil que han tenido que atravesar como banda?
Todos: Uhhhh -momento de suspenso-.
Cocó: Cuando falleció… Cuando nos agarramos a combos… -reímos-.
Chocho: No sé, la verdad. Creo que hubo un tiempo en el que dejamos de tocar porque no estaban los ánimos, pero no por una cuestión así tan drástica, si no como que lo entendimos así y dejamos de tocar un rato. Estuvimos como seis meses sin tocar y sin hacer nada, sin hablarnos, sin contestarnos el celu. Yo cacho que esa ha sido como la gran crisis que hemos tenido y hasta el día de hoy nos reímos de la hueá.
Cocó: Fue bueno igual, de ahí en adelante hicimos el otro disco. Nos concentramos en la energía de querer hacer algo, como que el hecho de no hacer nada igual fue como “puta ya, volvamos a hacer música”. Esas ganas como que hicieron el disco nuevo.
Chocho: Igual sirvió harto como para reinventarnos de alguna forma de lo que veníamos haciendo, nos tenía como un poco aburridos. Después de la “Gira Caterpillar”, veníamos tocando el “Costa Esqueleto” hace cuatro años y nos aburrió.
https://www.youtube.com/watch?v=bC0WQaeolDc
Pornografía es un disco en el que, a diferencia de Costa Esqueleto, se destaca un sonido mucho más experimental y un notorio uso de sintes, ¿esto era lo que querían lograr en primera instancia con el disco?
Cocó: El disco desde un principio no tenía un fin, estábamos viendo la forma de cambiar las cosas. Como decían los chiquillos, estábamos un poco aburridos de tocar siempre lo mismo y lo de los sintes, no sé. Siento que fue medio natural por las cosas que estábamos escuchando.
¿Y sus influencias en general cuáles eran?
Cocó: Ahora, en “Pornografía”, habían más cosas del hip-hop o pop que en el “Costa Esqueleto”.
Chocho: Tiene mucho que ver, porque, mayoritariamente, el disco se armó en el computador, no tocándolo como banda, sino que el Bastián llegaba con un tema y lo íbamos arreglando, ¿cachai? Era como una forma más fácil de probar texturas a ese nivel, con un controlador MIDI y el negrito se encargaba de las capas.
¿Como Shrek?
Chocho: Como las cebollas -risas-.
Niños del Cerro hace poco sacó el tercer single de su próximo disco y contaron con la colaboración de Chini Ayarza de los Chini and the Technicians, ¿han pensado en hacer un trabajo colaborativo con algún músico para sus discos?
Cocó: Lo Intentamos, pero no alcanzamos.
¿Qué pasó?
Cocó: No se dio. Al final de “Adiós Mundo!” íbamos a tener una colaboración con Bronko Yotte. Hablamos con el loco, quedamos de acuerdo y todo, pero después por tiempo no alcanzamos. Como que entramos, hicimos las mezclas y este loco estaba súper ocupado, así que al final no se pudo.
¿Pero está en mente?
Cocó: O sea, no sé si en algún futuro se vaya a dar, pero sería bacán.
“Marcha Imperial” es el tercer single de Pornografía, ¿podrían explicarme que quisieron representar en el videoclip de la canción?
Chocho: Cuando nos propusimos la idea de lanzar un nuevo videoclip por el disco, como que siempre hablábamos nosotros de internacionalizar la carrera. Entonces, en ese sentido, quisimos hacer un video que fuera súper fácil de captar, que fuese todo súper agradable y que además nos mostrara a nosotros cómo en verdad somos. Ya que siempre en los videos salíamos como actuando, en cambio en este no salimos actuando. De hecho, el director nos dijo que no había guión. Nos juntamos tal y tal día, pero no hay un guión.
Pasar de artistas como Los Bunkers o Los Tres a bandas como Adolescentes sin Edad, Dulce y Agraz e Inarbolece, es un cambio para la música penquista ¿cómo ven ustedes la renovación de bandas en Concepción?
Luciano (Rosales, batería): Ya se acabó el estigma del rock penquista. Las generaciones que vienen ahora no crecieron escuchando Los Bunkers en la tele.
Bastián: Ellos igual se influencian como en un conjunto más grande de cosas, con la internet ahora hay un bombardeo mucho más grande de información, está todo ahí a la mano y eso marca harto igual lo que se está haciendo ahora en Conce.
¿Creen que están los espacios para generar una nueva camada de artistas?
Luciano: No creo, pero lo que he visto en Conce es algo que no he visto en otras bandas. Dulce y Agraz, Inarbolece o Adolescentes sin Edad forman una performance super brígida, se creen demasiado el cuento. No sé, tu a Inarbolece los veís tocar y en cada show tienen un atuendo distinto, no es como ir a una tocata en Santiago donde es como un poco más ingenuo. No es una crítica, pero es lo que noto de repente con las bandas y lo que se nos pega un poco a nosotros.
Chocho: No es que los shows se repliquen, si no que son diferentes y tenís que ir a verlos o si no te los perdiste definitivamente y no volverás a repetirlos.
Hace poco anunciaron por sus redes sociales que estarán presentándose en México durante Agosto, ¿qué significa para ustedes la oportunidad de mostrar su música en otros países?
Bastián: Pucha, personalmente igual es soñao.
Todos: ¡Soñao, perro! -reímos-.
Bastián: Sí, soñao, perro. Lo que pasa es que siempre todos vimos súper lejano esto de llegar a viajar por nuestra música, ¿cachai? Al principio se veía algo súper inocente, quizás sin tanta pretensión, y ahora queda una semana pa ir a México, estar en varias ciudades. Igual es una cultura súper distinta y con gente que va a shows y se comporta de una manera diferente, independiente si reaccionan o no.
¿Sienten un poco difícil cautivar al público mexicano?
Bastián: No sé, igual como que vamos un poco a ciegas. No tenemos tantas expectativas, ni buenas ni malas. Tampoco tenemos una imagen mental de los locales o las calles.
Chocho: Llegaremos en una volá como grupo y que la gente reaccione a lo que nosotros somos.
Revisa acá las fechas que tendrá la banda en tierras mexicanas:
– Miércoles 01 de agosto en Caradura, Ciudad de México.
– Jueves 02 de agosto en Cerdo Picante, Puebla.
– Viernes 03 de agosto en Nodriza Estudio, Monterrey.
– Sábado 04 de agosto en Doppler Bar, Texcoco.
– Viernes 10 de agosto en Burnout Records, Querétaro.
– Sábado 11 de agosto en Café Bretón, Guadalajara.